Ya Nada es Igual - Lisa De Jong (Vero)

¡Hola! Soy una cabezota que no soporta dejar sagas o trilogías a medias y por eso me decidí después de un año a continuar con Lisa, mi sorpresa es que me gustó mucho más cuando era dramática que ahora siendo ligera. 

Editorial: Titania, 2017.

Original: Changing forever, 2014.

Género: romance, new adult.

Serie Rains:

1. Cada vez que llueve (Kate & Asher. Beau)

1’5. After the rain (Kate & Beau)

2. Ya nada es igual (Emery & Drake)

3. Vivir arrepentida (Rachel & Sam)

Emery White este año comienza en la universidad y tiene claro que nada la puede distraer, pues se tiene que centrar en los estudios y sacar las mejores notas posibles para que le vuelvan a conceder la beca, ya que su padre no se puede permitir sus estudios. Drake Chambers es el chico popular que finge ser un mujeriego, que vive para cumplir las expectivas de su padre, él tampoco pretendía unir su vida a la de Emery. Sus miradas se cruzaban en las fiestas pero no se permitían conocerse hasta que les asignaron un trabajo de clase juntos, a Emery le asusta pasar tiempo con Drake y perder sus objetivos pero es que a él también.

Los dos conocen a Beau y Kate porque van a la misma universidad que ellos, ven como ambos se dejan llevar por su apasionado amor, y sienten ganas de hacer lo mismo, pero se sienten atrapados por la presión que se ponen a si mismo. 

3'5/10

Mi cabezonería me llevó a este libro, pues odio dejar las cosas a medias (por ello probablemente también lea Vivir Arrepentida). También siento que los libros que se pueden leer de forma independiente al no seguir la historia de los anteriores protagonistas son nuevas oportunidades que le puedes dar a la autora, pues son historias que no tienen nada que ver y quien sabe, puede que alguna vez la autora te sorprenda y te encuentres con una historia que ames con toda tu alma (que no es el caso).

Mi decepción yo creo que fue porque a pesar de que el anterior libro no me encantó, si me gustó y me enganchó mucho, esperaba encontrarme algo parecido: un libro distendido donde pasar el tiempo y no pensar en nada más con personajes que más o menos me puedan gustar. Y bueno pues desgraciadamente no me encontré nada de eso. Los personajes me parecieron repetitivos, llenos de cliché y aburridos. Sin duda es de mis libros más decepcionantes.

Yo no se que me ha pasado este año, pero he ido de decepción en decepción (a partir de Septiembre la cosa mejoró en doramas y mangas), es inevitable que mi estado de ánimo con la pandemia estuvo decaído pero igualmente no venían a mi vida buenas historias. Esta no es precisamente buena o recomendable y entiendo que Mayu lo abandonara. Es que principalmente es un libro que promociona las relaciones tóxicas que no hacen bien.

Emery siempre ha sido una chica que cumple las normas, no tiene demasiados amigos, pero vive una vida tranquila. Emery siempre ha vivido con su padre pues su madre la abandonó cuando era pequeña, y siempre llevará consigo los recuerdos dolorosos de su partida y el sentirse una niña insignificante que ni su madre la puede querer. Ella esconderá todos estos sentimientos en su corazón, nunca ha permitido a nadie traspasar esa barrera. Por ello se creó una especie de "reglas" para no sufrir más, como no enamorarse nunca para que no destrozasen su pequeño corazón de nuevo. 

Emery White está comenzando a vivir de un modo diferente a como lo hacía antes. No puedo decir que la odié, pues es una buena chica con muchas dudas y el corazón roto que se intenta aislar para no sufrir, pero era desesperante como querias que la cosa avanzara entre ellos y ella nunca se lo permitia y le daba vueltas y vueltas a sus problemas, llegando a desesperarme. Así que en mi recuerdo se queda como una chica normal, con un pasado doloroso que simplemente espero que deje todos sus prejuicios de lado y se permita ser feliz.

Drake Chambers aparece en su vida sin esperarlo. Es el quaterback del equipo de la universidad, una estrella que todo el mundo se le acerca por interes, menos Emery pues ni le importa el fútbol americano, ni quien sea Drake. A ella solo le intrigan sus ojos verdes y que tras su coraza de hierro se esconde un corazón puro y bondadoso. Me hubiera gustado que Emery no hubiese juzgado a Drake por su físico, que hubiese visto más de él que un simple chico guapo (aunque él también lo pone dificil) y la verdad es que nunca sentí la transición de que Drake le atraiga a estar completamente enamorada de él, todo fue como muy brusco y forzado.  

Drake no es el niño mimado y exitoso que parece, pues también ha sufrido mucho. Cuando era pequeño su padre falleció, tras este acontecimiento, su madre cae en una profunda depresión y él deberá hacerse cargo de sus hermanas, pues su madre no se levanta de la cama. Su padre amaba el fútbol americano y es quien le animaba en este camino, tras su partida, decidió complacerle y darlo todo por este deporte, para ser el mejor y que su padre se sienta orgulloso de él en el cielo, aunque no sea lo que realmente le gusta. Por ello no busca distracciones, fiestas, ni a Emery White, aunque sus pensamientos vayan hacia ella. 

No considero que Drake tenga baja autoestima, si no que lo único que le quedaba para no dejar ir del todo a su padre era el futboll, por ello se volcó completamente a ello, intentando enfrentarse a una realidad. Para mi es imposible juzgarle por ello, pues en cierta medida se estancó en su parte del duelo. Drake a mi me daba muchísima pena, pues siento que Emery solo pensaba en ella, en cambio Drake pensaba en lo mejor para los dos. Tampoco es mal chico, simplemente es muy cabezón y hay que tener mucha paciencia con él, porque lo arrebatos que tiene cuando está enfadado no son normales. Pero en el fondo tiene un buen corazón y solo quiere dejar de sufrir.

Ambos se hacen mal, no se comunican entre ellos cuando tienen dudas o problemas, simplemente se refugian a solas, de nuevo, intentando curar sus propias heridas, no tienen nunca confianza el uno en el otro. Continuamente se ponen trabas en su felicidad y es desesperante ver como hacen un problema por cualquier tonteria y simplemente se dejan de hablar o se tratan mal, todo eso hace que se incrementen aun más sus miedos, encerrándose en una coraza muy difícil de romper.

Drake y Emery se atraen desde el primer momento y ambos saben que se quieren repeler pues si no pueden sufrir, pero al final ambos sienten que se merecen ser felices, se merecen sonreír y no tener preocupaciones, despertarse abrazados al lado del otro y sentir amor. Pero hasta llegar a ello, es desesperante sus idas y venidas, sus malentendidos. Entiendo que cada uno lleve su pena y su dolor de diferente manera (diferente a la de Kate y Beau), pero ambos deberían haberse tratado psicológicamente desde que pasaron los trágicos accidentes en sus vidas para seguir adelante y afrontar nuevos retos.

Kate y Beau (los protagonistas del anterior libro) salen poquito en este libro y la verdad es que me pareció bien, osea siento que su historia ya fue contada y es bonito verles felices pero sus voces ya no son tan importantes. Ambos ahora son felices, han madurado juntos y es una delicia ver como confían el uno en el otro, pues a pesar de que no tener una relación perfecta, es preciosa.

Lisa De John me decepcionó esta vez pero espero que no lo haga para la siguiente aunque todavía me quedan muchos libros en la lista de sagas empezadas por delante. Pronto leeré Hija de humo y hueso, ¡deseadme suerte!

Vero.